viernes, 16 de abril de 2010

Yuyerías cotidianas

No, no andaba de parranda…Esta escribana, sucumbió ante las tentaciones mediáticas, generadoras de notas espectaculares- y no me refiero a lo grandilocuente del adjetivo, sino al burdo chou armado en torno a los casos Paulette, la opresión de COFETEL, Scherer desayunando con Zambada y la venta de nuestro querido Chicharito al Manchester United.

Si bien tengo varias propuestas cocinándose en el horno de la Yu, quiero darles su justo tiempo de cocción para que las ideas no queden crudas o insípidas. Sin embargo, he aquí un par de anécdotas dignas de comentar y que hasta la fecha, me siguen pareciendo involuntariamente risibles.

Quién no llegó a pasar recaditos amorosos a los maestros estando en primaria o secundaria. En un mundo Hello Kitty son de esas cursilerías que nos provocan un ¡Ah! cuando la protagoniza un impúber, mas cuando tienes veintitantos y estás en plena universidad, sí provocan un enérgico ¡No mamen! por decir lo menos. No soy hipócrita, a la mayoría de las féminas que compartimos esa clase nos gusta el maestro en cuestión, pero niñas, qué no hay forma más madura de hacérselo saber que un “Las que estamos enamoradas de usted” escrito en plena lista de asistencia.

Lo asumiré cuando llegue el 2040 y este planeta no tenga gota de agua para el consumo humano. Serán más que entendibles las guerras entre naciones por el vital líquido. La desesperación nos llevará a participar en justas apocalípticas que hoy, sólo vemos como exageraciones cinematográficas del productor en boga. Pero pelearse por garrafones de agua en una oficina de gobierno, es una verdadera estupidez. Los grupos en pugna, a quienes he denominado el bando A y el bando B, han desatado una trifulca por la hegemonía del servidor del agua.

La inteligente solución del bando A:

A menos de que mantengan el control y uso exclusivo del aparato, prefieren regresarlo a su dueño original.

Ideología denotada: “Chíngome yo, chínguense todos”.

La mediadora solución del bando B (Al cual me he sumado):

Asumir la utilización y mantenimiento de éste de forma grupal, así como hacer una cooperación semanal para que todos y no unos cuantos tengamos agua para beber.

Ideología denotada: “Pa´todos hay”.

Debieron ver el drama a la hora de discutir esto. Sólo faltó un alarido a la de “Pepe el Toro es inocente”, cuando se descubrió quién tiró accidentalmente el servidor del agua.

No estamos lejos del soylent rojo y amarillo lo admito,¡el destino ya nos alcanzó! pero bendita madre Tierra, todavía nos soporta; si ella no es mezquina y miren que tiene motivos de sobra para serlo, por qué nosotros sí.

 
SALUDOS

YU